En Los Dedos de Dios

En los dedos de Dios

I

Una gota de sudor cae por la frente de aquella mujer esquelética, el calor lo arrasa todo. Dentro de ésta funeraria se siente una terrible humedad, hace días la calefacción no sirve, pero los clientes de esta mujer no se quejan, están muertos, y la única queja de esta mujer, es tener hambre; ella posee una enfermedad tan extraña como terrorífica, por más que coma esta mujer siempre tiene hambre y su cuerpo siempre permanece esquelético. Ella es alta, es la maquillista de la funeraria, se cuenta que es la mejor de todas, sus manos tan hábiles, con los pinceles puede recordarnos a los grandes maestros de la pintura barroca, no es ninguna coincidencia trabaje en esta funeraria, o que ahora mismo le hayan encomendado a poner hermosa a esta Dama de alcurnia. Conocida en la ciudad como una de las mujeres más ricas y poderosas, también un criminal, una dama, una traficante, la dueña de bares y  el cabaret más impresionante que jamás se vio en la ciudad, el “Cabaret Pop”

Ya tenia casi todo el día encerrada allá abajo, en aquél sótano, postrado a un lado de la sala de depósito y mesa de disección, ocultando moretones y rasguños en rostros, vistiendo y colocando las vestimentas correctas para sus clientes. pero esta Dama, la que había fallecido no hace más de 14 horas, a causa de un disparo que le perforo el corazón, era un caso especial, la maquillista se preguntaba el porque esa herida en particular. desde que había observado el cadáver en la mesa se preguntaba de esa herida que era hermosa, inclusive le había preguntado al dueño de la funeraria, que se negó en todos los sentidos a responderle cualquier cosa que no fuera las palabra “pecados”. La maquillista, conociendo a su jefe sombrío y lúgubre ya no pregunto más, tarde o temprano sabría todo. Siguió con su labor, pensaba en la Dama en como debería dejarla perfectamente hermosa, hasta que al mirarla en su féretro pareciera que dormía, pues era lo menos que una mujer así(de su importancia)pudiera lucir el día de su funeral. La mujer suspiro, alisto la ropa que le pondría más tarde a la Dama junto a la mesa, comenzó a terminar los detalles. Casi estaba terminado el trabajo la  muerta tenia una perfecta imagen de Dama, una imagen como una foto dentro del alma de alguien que no esta, era lo justo después del arduo trabajo de las casi 24 horas encerrada en ese sótano, tenia hambre y calor, también quería dormir y se alegraba de ver realizado su trabajo.

Recordaba como una noche antes, el dueño de la funeraria recibió una llamada, de ese viejo amigo de juventud, -tengo 7 cuerpos-  le dijo al funerario, -para tu deleite personal- -son cuerpos frescos pero algo maltratados ¿te interesan?-, El Funerario, un hombre pálido, flacucho y alto, con dedos largos, muy fríos, ojeras muy marcadas y mirada macabra. le respondió a su amigo el medico forense, que iría a verlo a la morgue. Aquel forense experto en patologías, enfermedades raras y mortales, amigo del funerario en su juventud habían compartido aventuras e historias, hasta el día en que se separaron por sus intereses personales, que con el tiempo estos mismos les volvieron a juntar, el día ñeque decidieron dedicarse a los muertos.

En la morgue del anfiteatro, el funerario se entrevisto con su querido amigo, cómplices de sonrisas se abrazaron y dieron cordiales saludos. El forense, vestido en su elegante bata blanca olor a formol y otros químicos, le presento siete cuerpos a su amigo, perfectamente acostados en una fila en aquel frió recinto, los cuerpos que un detective le había traído a este forense, muy ilegalmente;  y que su costo si fue considerable, bien valían la pena. Eran una colección de cadáveres exquisitos, una invasión a los sentidos, todos diferentes, en forma y clase, en cuerpo y aspecto, en muerte y desilusión. El forense, tan entusiasmado como el funerario, siguieron conversando, mientras esperaban al chofer de la funeraria que traía la carroza para llevarse los cuerpos a la funeraria.

El Medico forense, le relato a su amigo, que le había preguntado el origen de estas muertes. el forense le comenzó a contar con detalles lo que aquel detective le había dicho; -este detective, ya sabrás quien nuestro buen amigo y siempre confiable al momento de matar, es muy diestro en pelea y uso de armás, violento de esos que solo buscan quien se las pague, me llamo después de hallar a los cuerpos, fue directo, y se explico –tengo siete cadáveres  y pensé en mis amigos amantes de muertos- No lo dude, le dije los trajera o que nos encontráramos en algún sitio, así fue el llego una hora después, con siete bolsas negras, las subimos a camillas, las metimos a la morgue ahí descubrí los cadáveres, su belleza y sus secretos.

Dentro de la morgue, el detective, saco una pequeña ánfora y dio un trago, listo para marcharse, le pague, pero no deje que se fuera así tan  fácil, le dije, mejor dicho le pregunte; -¿no me vas a contar que hiciste?- el se sonrió y se sentó en una silla, así fue como comenzó a relatarme los sucesos.

II

-Te contare si es que tanto te importa saber como es que han llegado aquí los cadáveres; Esta mujer, la gorda, fue una mujer obsesionada con aquel hombre, este hombre el chulo y dueño de uno de los burdeles de la calle 83, enamorado de su hermana inútil y caprichosa incapaz de levantar una sola pestaña por si sola, pero la misma mantenía una secreta relación con el chulo su hermano quien era un sexópata lascivo, ambos eran amigos de este otro, que deseaba a esta chiquilla inútil y al mismo hermano. Este hombre de aquí es un asesino contratado por esta mujer, la Dama, para matar a este chulo que tanto le importunaba y esta ultima, la mejor prostituta de la ciudad que al ver que podía tener una oportunidad no dudo en tomarla, pero nunca supo que todos tenían algo que ver y terminarían aquí, cada uno a causa de sus parafilias, son gente perversa pero criminales y yo un hacedor de justicia.

La gorda tan enfurecida al enterarse del romance de ese chulo con su hermana se deprimió tanto, que siguió con su actividad diaria, comer hasta  no poder hacerlo más, esta gorda conoció a este chulo meses antes cuando completamente ebria y con ganas de comer algo más humano, encontró al chulo este que jamás ha despreciado un buen polvo o malo, sea el caso,  termino follando con la goda, que encantada se enamoro de el al grado de llevar su vida en obsesionarse con el tipo, su mente solos se fijaba en tratar de comerse al tipo este, ya entenderá” la desesperación que le acarreo enterarse que el chulo tenia un romance con su hermana. Decidida simplemente salio a buscar a la hermana del chulo, una hermosa mujer, con tremendo cuerpo como podrías ver en el cadáver, nada mal en realidad, pero su problema era su apatía a todo, inclusive a morir.

El chulo por otra parte, había sostenido tremendo revolcón con la prostituta, siempre le gusta probar la mercancía antes de comprarla, el tenia en mente convencerla para que aceptara trabajar para el en su burdel, uso los encantos que disponen los truhanes estos, su sonriso seductora, sus dedos juguetones, el tipo era un experto pocas mujeres podrían resistirse a el, y esta mujer era una de ellas, lo único que quería  con el chulo era acostarse y listo, nada más le interesaba de aquel padrote y lo rechazo. Pero el enfurecido, le dio una golpiza, le violo y la mando directo al hospital diciéndole que se acordara de esto y que se la pensara dos veces antes de volverle a decir que no, advirtiéndole también que  en cuanto pueda volver a abrir las piernas  la iría a ver para  recordarle la oferta que tenia para ella.

La prostituta, dejo de ir por un mes a trabajar, ella trabajaba para la Dama, que se encontraba muy enfurecida porque no permitiría que un imbecil como ese chulo de cuarta, abusara y golpeara a la mejor de sus chicas, así que decidió terminar este asunto. Prometiendo que jamás nadie volvería a insultarle de ese modo, mando a llamar a este hombre, el asesino, para que terminara con la vida del chulo y le recordara quien mandaba.

Para cuando la gorda acudió a la casa de la hermana, sabiendo que solo estaría ella, y casi como de costumbre durmiendo, no le fue difícil entrar, ni siquiera matarla, la gorda entro lenta y torpemente con un martillo, cerro la puerta de la casa, puso el seguro, música algo fuerte, y se dirigió a la habitación de la tipa, ahí ella dormía tan profundamente que ni la música, o el ruido de los pasos lentos que hacían crujir el viejo piso de caoba roja de la casa despertaron a la mujer. La gorda, la miro con ira, alzo el martillo y comenzó a darle golpes en la cara, le dio dos, la mujer despertó gritando, pero un tercer golpe le destrozó el cráneo por la parte izquierda de la sien,  la mujer aturdida, respiraba lento, mientras la sangre  escurría hacia su cama, no quedo muerta con el golpe del martillo, respiraba, como si al final su apatía y flojera se reflejara en su lecho de muerte. Insatisfecha la goda, la siguió golpeando, hasta que la cabeza de esa mujer incestuosa, quedara hecha añicos. Dicen que era una mujer bella y en su mirada podías ver la hora en la que se detenía el crepúsculo justo como cuando ves a Dios.

Cuando el chulo fue a ver a su amante esa noche, descubrió el cuerpo, alarmado y enfurecido, corrió a contarle a su mejor amigo, quien es un bisexual enamorado de los hermanos en secreto, que tanto deseaba a uno como a la otra, así como tanto envidiaba a el como a ella por tenerse juntos. El amigo trato de calmar al chulo, mientras se lamentaba de la muerte de la chica, sonreía pensando que tendría al chulo para el, y así fue, usando arduas y hábiles caricias sin mencionar a los gramos de cocaína que hizo  consumiera el chulo, termino besando y acariciando a su amigo. Una hora más tarde salio a buscar quien había matado a su secreta enamorada, a el nunca le gusto que tomaran sus cosas, era muy envidioso en ese aspecto.

La tarde caía la postitula recorría  el cabaret, hace dos días que podía caminar, volvía a ser hermosa a sentirse hermosa, podía trabajar, deseaba dinero quería dinero, lo conseguía moviendo sus caderas. El calor de los hombres, todo lo que ellos podían darle ella lo ambicionaba, fue cuando lo vio, a el, ese asesino contratado por la Dama, para que matara al chulo era inconcebible maltrataran a sus chicas y se fueran impugnes,  La Dama necesitaba calmar su enojo,  seguir sintiéndose la dueña de todo, ella lo sabia, la prostituta se acerco al asesino, lo sedujo, le insistió tanto en que debía matar al chulo, pero que antes de eso, se enterara la razón por la cual moría, el tipo sonrió, beso y toco a la prostituta, ella le dijo; -se mi venganza, se mi ira- el asesino tomo su chamarra con la leyenda pintada en la espalda “HATE” y salio a buscar al chulo.

Yo estaba investigando sobre ese chulo, así que le pregunté a la gorda si sabia donde podría encontrarlo, le mostré fotos, donde se besaba con su hermana. La gorda no dijo nada solo me cerro la puerta en la cara.

Cuando el amigo del chulo se entero quien había sido el homicida de la hermana de su amigo, el asesino, ya tenia agarrado de los cojones al chulo, fue fácil hallarlo y atraparlo, tan solo había que jugar con sus perversiones, lo acorralo en su casa, y ahí fue donde  comenzó el principio del final de estas batallas del fin del mundo-

Furioso y fuera de control, el amigo halló y entro en la casa de la gorda, con un bate de béisbol y una daga. Abrió al puerta de una patada, sorprendió a la gorda en mitad de una comida, le dio un golpe en la panza que hizo escupiera lo que comía después volvió a pegarle en el abdomen, la gorda gritaba y lloraba, el la golpeo, se coloco sobre de ella metiéndole comida en su boca impidiendo volviera a gritar, le propino más golpes, dejo el bate, para pegarle con los puños, después la pateo. La gorda se movía grotescamente revolcándose en la comida que escupía, cuando se canso de golpearla, le corto el cuello con la daga y se marcho, dejando ese enorme cadáver encharcado en una horrible y asquerosa combinación de sangre y comida.

Cuando el amigo volvió para encontrarse con el chulo en su casa, este observo aquella motocicleta estacionada, la puerta forzada, las cortinas y ventanas cerradas todo a oscuras, entro a la casa con precaución, al entrar observo al chulo colgando, el asesino, lo había amarrado de las muñecas y colgado al techo, se notaban sus brazos rotos, tremendas torturas, el chulo estaba lleno se sangre, completamente rapado y con una bola en la boca que le impedía gritar, estaba desnudo, con un palo metido en el culo e innumerables golpes y cortadas, así como su miembro amputado a un sangrante. En el pechó tenia marcas de fierros que habían sido calentados para marcarlo como si un animal de rastro se tratara. Cuando el amigo llego el asesino tenia en la mano un fierro y un soplete que pretendía usar para cauterizar la herida de la entrepierna del chulo, lo vio, sin pensarlo y con una sonrisa corrió a clavarle un fierro al rojo vivo al tipo que había venido a interrumpirle su diversión, con el soplete le quemo un hombro, el amigo grito, pero este le dio una apuñalada al asesino, en ese instante que le enterraba parte del fierro y le quemaba. El chulo colgado agonizaba de dolor. El asesino saco una pistola le disparo al amigo, el cual murió casi al instante, todo fue demásiado rápido, casi tan rápido como lo que tardo el asesino en levantar sus juguetes y marcharse, dejando lo que quedaba del chulo, que colgaba cual sentenciado por el Santo Oficio.

En el Cabaret Pop el asesino llego herido buscando a la Dama, le pido ayuda, esta le sonrió, le dijo que saliera de su oficina que estaba ensuciando todo; -márchate que alguien como tu no puede venir a exigir algo en este lugar, a mi yo tan Dama y dueña de todo- Enfurecido el asesino saco de debajo de su brazo una psitola, le disparo, dándole un certero tiro en el corazón rompiéndole todo lo que tenia, su dinero, su nombré, su vida, la herida que le atravesó el corazón dejo un cadáver, tirado de lo que antes había sido la mujer dueña del cabaret. Fue cuando entro la prostituta quien hábilmente pensó en apoderarse de todos los negocios de la Dama con tan solo desaparecer al tipo. Su entrada fue pertinente, ella lo beso y sedujo, le dijo que había hecho un gran trabajo, se acerco al cuerpo de la Dama, contorneándose como gatita, tomo una pistola de entre sus muslos y antes de que pudiera pensar en dispararle al asesino, este ya le había pegado un tiro en la cabeza, ese hombre era para matar. Tomo su dinero y algo más, todo lo que pudo tomar del cuerpo de la Dama y la prostituta, para después salir sangrando en busca de un medico tubo que  matar a un par de guardias del cabaret, pero eso fue trabajo de niños.

En plena noche se suscito nuestro encuentro, ya tenia largo rato siguiéndole, lo miré, mientras me fumaba un cigarrillo, el caminaba con dificultad, entraba a un hotel de quinta, le hablé, el volteo, fui directo, mi mirada lo dijo todo, el se entero, no nunca ando con rodeos, es mejor actuar, le pegue dos tiros el primero fue para terminar con su vida y expiar sus pecados, los de todos, el segundo fue por placer.

El resto de lo ocurrido ya lo conoces; levante el ultimo cadáver, lo embolse y lo guarde en mi casa, como todos los demás, pensé enseguida en llamarte y complacerte amigo a ti y a ese hombre  de la funeraria, aquel que tarde o temprano nos tendrá entre su enormes y fríos dedos.